Alertas

Incursión paramilitar y confinamiento en el Nordeste Antioqueño

Militarización del territorio

Alerta Temprana Nº 12

Ante la mirada impávida del gobierno nacional, las fuerzas militares y la gobernación de Antioquia, el nordeste antioqueño sigue afrontando una difícil crisis humanitaria, esto debido al avance de grupos paramilitares en la zona, denominados “AGC, EGC”, que, a su paso, amedrantan comunidades agro-mineras, se apropian de bestias, alimentos y generan un ambiente de pánico social, que ha resultado desde el año 2023, en múltiples migraciones de comunidades a cascos urbanos en busca de garantías de permanencia en los territorios, que hoy, abril de 2024, se agudizan.

Hechos

  1. El pasado 1 de abril de 2024, las Autodefensas Gaitanistas de Colombia AGC emitieron un extenso comunicado en donde anunciaban el cambio de nombre, de “AGC” por la sigla “EGC” (ejército gaitanista de Colombia) en el mismo comunicado anuncian el fortalecimiento de sus tropas, los objetivos y la visión de la “paz total” del Gobierno Nacional, criticando esta, como una estrategia para negociar simplemente con la insurgencia armada.
  1. El pasado 2 de abril, las comunidades de la vereda Lejanías, municipio de Remedios (nordeste antioqueño) denunciaron presencia de las AGC, hoy “EGC”, en el territorio. Horas más tarde, la comunidad oye enfrentamientos que duraron mas de 3 horas.
  1. A la fecha, aproximadamente 85 familias se encuentran confinadas en la iglesia cristiana de la vereda Lejanías, y por lo menos 8 núcleos familiares se desplazaron hasta la cabecera municipal, pues temen por su integridad y están entre la dicotomía de abandonar su territorio o quedarse a la suerte de este grupo.
  1. El pasado 2 de abril de 2024, las comunidades de la vereda Rancho Quemado, municipio de Segovia (Nordeste antioqueño) denunciaron también, presencia de paramilitares de las AGC, EGC, en el casco urbano del caserío, tras la salida del ejército que se encontraba allí hace varios días; y aunque la distancia es significativa entre la vereda de Lejanías (municipio de Remedios) y Rancho Quemado (municipio de Segovia), esto demuestra que existe presencia de un gran número de paramilitares, que ocupan el territorio del nordeste antioqueño y sur de Bolívar.
  1. El 3 de abril de 2024, las comunidades informaron que el ejército hizo presencia en la vereda de Lejanías. Ese mismo día, desde la vereda Arenales del municipio de Segovia, salieron tropas del ejército, aparentemente en dirección a Rancho Quemado.
  1. El 3 de abril de 2024, antes del ejército hacer presencia en la vereda Lejanías, los paramilitares se desplazaron hasta el caserío de la vereda el Piñal (municipio de Remedios) en donde llevan más de tres meses acampando en la montaña, y se informa, que pueden ser más de 200 hombres.
  1. El mismo 3 de abril de 2024, los paramilitares que un día antes patrullaban en la vereda de Rancho Quemado, se movieron mágicamente antes de llegar el ejército. Mientras, por otro lado, se observaba la llegada de gaitanistas a la finca La Esperanza, cerca a la vereda Arenales.  

Exigencias

  1. Convocar a misiones humanitarias con presencia del alto gobierno, las gobernaciones de Bolívar y Antioquia, el Ministerio Público, las organizaciones de DDHH y comunidad internacional. Atendiendo la crisis del Nordeste Antioqueño y sur de Bolívar, como situación de grave emergencia humanitaria, que debe focalizar recursos públicos, presencia institucional y una estrategia verdadera del desmonte del paramilitarismo.
  1. Reanudar la mesa de concertación entre el Gobierno Nacional y las comunidades del sur de Bolívar, Nordeste antioqueño, centro y sur del Cesar, derivada del paro de la Lizama del año 2023, en donde el tema central es el desmonte del paramilitarismo. La cual, a la fecha no se ha reanudado.

Este devenir entre el ejército y los paramilitares de las “AGC/EGC” llama poderosamente la atención, pues se ha convertido en un círculo vicioso, en donde los militares llegan, ellos se van, los militares se van y ellos llegan; una suerte de “cacería de brujas” que no termina nunca.

No basta con que las fuerzas militares, el Gobierno Nacional y las gobernaciones de Bolívar y Antioquia, convoquen a consejos de seguridad, (como el desarrollado el pasado 14 de febrero del año en curso), si las conclusiones de estas reuniones, no definen estrategias claras y concretas de un desmonte del paramilitarismo, como una estrategia anquilosada y enquistada en muchos mandos de nuestras fuerzas militares.

La Corporación Comité de Derechos Humanos Jesús María Valle Jaramillo denuncia y hace responsables al Gobierno Nacional en cabeza de GUSTAVO PETRO y FRANCIA MÁRQUEZ, el Gobernador de Antioquia ANDRES JULIAN RENDÓN, el Alcalde de Remedios ALBEIRO ARENAS MOLINA, el alcalde de Segovia EDWIN ALEXANDER CASTAÑEDA VAHOS, el Ministro de Defensa IVÁN VELÁSQUEZ, a la Procuraduría Regional de Antioquia, la Personería municipal, la Defensoría del Pueblo, el Ejército Nacional y a la Fiscalía General de la Nación de las consecuencias que se puedan presentar por la omisión de atender oportunamente el llamado legítimo de las comunidades a través de esta alerta humanitaria.