Ecos Disonantes

Ecos Disonantes es el proceso que trabaja y desarrolla el eje de comunicaciones de la Región de Los Dos Ríos, nace como un medio de comunicación popular y como alternativa a los medios de comunicación tradicionales que transmiten la cotidianidad, los sucesos y la historia, con intereses convenientemente acomodados a los discursos de los poderes políticos y económicos dominantes, los cuales ocultan e invisibilizan la otra Colombia, la tierra profunda, la patria olvidada, la voz de los campesinos, de los afros, los indígenas, los trabajadores y los estudiantes, y en general, de las comunidades que desde su diario vivir ejercen y construyen poder popular al defender la vida y la permanencia en los territorios, la soberanía alimentaria y la organización de los pueblos, poniendo como eje central la idea de construir un país para la vida digna y una nación en donde quepan todos los colombianos, principalmente los oprimidos y los explotados.

Para alcanzar una Colombia soberana y libre es necesario transmitir y comunicar su diaria resistencia por medio de lo cultural, de la libre expresión y el derecho a una información que sea el mensaje de los que no tienen voz y que cuente la verdadera realidad, aquella que simplemente quiere ser disfrazada o maquillada por la hegemonía capitalista. Somos los hijos e hijas de la región de los Dos Ríos, nacemos principalmente con la intención de comunicar no solo las problemáticas que aquejan y se viven en los territorios de esta bonita región, sino también sus historias, sus hazañas, sus maneras y visiones de vivir en comunidad, de construir su propio proyecto político como derecho a la autodeterminación de los pueblos.

Corporación de Derechos Humanos Jesús María Valle Jaramillo

La Corporación de Derechos Humanos Jesús María Valle Jaramillo se constituye como un proceso de defensa de los derechos humanos y como un mecanismo de autoprotección de las comunidades campesinas y agromineras de la Región de Los Dos Ríos, con el objetivo de elevar sus exigencias y reivindicaciones sociales, mediante ejercicios de interlocución y denuncia frente a riesgos y violaciones a los derechos humanos, con actividades de formación, promoción y difusión, así como acciones de movilización política, en búsqueda de generar transformaciones estructurales y aportar en la construcción de justicia social para las comunidades históricamente excluidas, reclamando condiciones de vida digna y garantías de permanencia en los territorios.

En Colombia, la abundancia de riquezas ha atraído la presencia de industrias extractivas que afectan los ecosistemas y los derechos humanos, generan conflictos socioambientales y profundizan las brechas de desigualdad social, razón por la cual, es esencial fortalecer la capacidad de las comunidades para organizarse y defender sus derechos, visibilizando la violencia estatal y paraestatal, en aras de generar presión sobre los responsables de violaciones a los Derechos Humanos y el Derecho Internacional Humanitario, recurriendo a instancias nacionales e internacionales para avanzar en la lucha contra la impunidad, a la vez que se promueve a nivel local la formación de comités de derechos humanos y liderazgos sociales como ejercicio de poder popular.

Comisión de Interlocución del Sur de Bolívar, Centro y Sur del Cesar, Sur del Magdalena y los Santanderes

La Comisión de Interlocución del Sur de Bolívar, Centro y Sur del Cesar, Sur del Magdalena y Procesos de los Santanderes nace como acumulado de los diferentes momentos históricos de lucha del campesinado desde la ANUC y de construcción de tejido social desde 1985 que ocurre el éxodo campesino. A partir del 2005 se le da el nombre de Comisión de Interlocución, que tiene como principio la defensa de la vida y la permanencia del territorio donde se articulan la diferentes organizaciones y procesos de la región en un contexto de crisis humanitaria generada por las políticas de un modelo de acumulación y despojo de los bienes de las comunidades, el cual en la región se materializa en el modelo extractivista que han venido  desarrollando el gobierno en estos últimos 20 años.

La Comisión de Interlocución surge como resultado de las históricas luchas campesinas, que vienen desde la Asociación Nacional de Usuarios Campesinos (ANUC) y desde el fortalecimiento del tejido social tras el éxodo campesino de 1985. A partir de 2005, se consolida bajo el nombre de Comisión de Interlocución, con el principio fundamental de defender la vida y garantizar la permanencia de las comunidades en sus territorios.

Este proceso se desarrolla en un contexto de crisis humanitaria provocada por políticas orientadas hacia un modelo de acumulación y despojo de bienes comunitarios. En la región, estas dinámicas se han materializado a través del modelo extractivista promovido por el gobierno durante los últimos 20 años, lo cual ha generado profundos impactos sociales, ambientales y económicos.

La comisión desempeña un papel clave en la construcción y fortalecimiento organizativo de las comunidades mediante:

  • Defensa de los Derechos Humanos y el Derecho Internacional Humanitario (DIH): Acompañando a las comunidades en la protección de sus derechos frente a amenazas constantes.
  • Lucha contra los megaproyectos minero-energéticos: Rechazando iniciativas que afectan la sostenibilidad ambiental y vulneran los derechos de las comunidades.
  • Defensa del medio ambiente: Promoviendo la preservación de los ecosistemas locales frente a la explotación indiscriminada.
  • Lucha por la tierra y recuperación de la economía propia: Impulsando una reforma agraria integral y modelos de economía solidaria y autosuficiente.
  • Construcción de las guardias campesinas: Fortaleciendo la organización comunitaria para la protección del territorio y la autodeterminación.
  • Movilización permanente: Visibilizando las problemáticas de las comunidades y exigiendo soluciones integrales.

Gracias a estas acciones, en 2013 la Comisión logró expandirse geográfica, política y socialmente hacia el centro y sur del Cesar, el sur del Magdalena y los procesos organizativos de los Santanderes. Este avance representa un paso importante en la lucha por la dignidad, la justicia social y la soberanía de los territorios campesinos frente a las dinámicas de exclusión y despojo.

En la comisión se construye y se fortalece el trabajo organizativo de las comunidades, el trabajo de derechos humanos y el DIH, la lucha contra megaproyectos minero energéticos, la defensa del medio ambiente, la lucha por la tierra y recuperación de la economía propia, la construcción de las guardias campesinas, y la movilización permanente, lo que nos permitió en el año 2013 avanzar geográfica, política y socialmente hacia el centro y sur del Cesar, sur del Magdalena y procesos de los Santanderes.

Asociación de Familias Agromineras del Sur de Bolívar y Antioquia

La Asociación de Familias Agromineras del Sur de Bolívar y Antioquia -AFASBA, también conocida como Familias campesinas, nace de dos momentos diferentes, uno de ellos sucede en el corregimiento San Lorenzo, para el año 2002-2003, con el comité de raspachines de la vereda Lejanías (o Alto Paraguas) que empezó a replicarse en las demás veredas y tomó fuerza para el año 2004 con las fumigaciones. Muchos raspachines se fueron y los líderes empezaron a integrarse más en las juntas de acción comunal y vieron la necesidad de crear algo que permitiera abarcar la región, algo que les agremiara y no se limitara tanto como las JAC; surge pues, la propuesta de una asociación cuyo horizonte sería la familia campesina; su economía, cultura y formas políticas y no una delimitación geográfica como a la que están sujetas las JAC.

El segundo momento se da con el comité de mineros de la vereda Santo Domingo, Bamba y Ahoga perros quienes ven la necesidad de estar organizados para defender su permanencia en el territorio. AFASBA defiende y lucha por la transformación de las condiciones actuales en las que vive el campesino que ejerce la minería, cultivos de hoja o raspa, químicos, arrieros, todas esas actividades materiales que se generan en el campo del valle del río Cimitarra, la serranía de santo Domingo, el río Ité y Tamar, sur del bolívar y Nordeste Antioqueño.

Asociación Agrominera del Sur, Sur de Bolívar

La Asociación Agrominera del Sur, Sur de Bolívar -ASAMISSUR- se encuentra ubicada en la zona rural del municipio de San Pablo, hace parte de la organización social regional Fedeagromisbol, y cuenta con una dinámica social propia en su territorio. Sus principales luchas son la defensa de la minería artesanal, los derechos de los mineros que trabajan en el territorio e incentivar la identidad cultural. El nacimiento de la organización se dio en agosto de 2007 en la vereda El Jardín del municipio de San Pablo, buscando enfrentar principalmente la falta de trabajo, los conflictos y la falta de apropiación del territorio, y así es como una junta de acción comunal y unos mineros con asentamiento en el territorio deciden hacer una asamblea y conformar una figura jurídica autóctona.

A partir de la conformación de la asociación se planea el cumplimiento de cuatro tareas: la primera, generar una organización por comités y juntas de acción comunal; la segunda, la lucha por la tierra y el territorio, y para ello se propone defender ante las instituciones del Estado la propuesta de declaratoria de zona de reserva especial minera, la protección de la biodiversidad y fuentes hídricas; la tercera, darle identidad y pertenencia al proceso social mediante el diseño del escudo, la bandera, el himno y otros símbolos creados por los asociados; por último, de manera constante gestionar con el Estado, ONG’s y otras instituciones, proyectos productivos, de minería, ambientales, de educación, de salud y culturales. Lo anterior en la búsqueda de una efectiva defensa de la vida, la cultura y la autonomía en nuestro territorio.

Asociación Agro Minera del Cauca

La idea de asociación nace a finales del 2008, pero solo fue hasta el 2009 que se logró conformar como ASOMICA (Asociación de Mineros de Cáceres). Hasta ese momento solo teníamos como socios a los mineros de la zona; es solo finalizando el año 2009 cuando se vió la necesidad de integrar el campo en nuestra razón social y se decidió cambiarle el nombre por Asociación Agro Minera del Cauca – ASOAGROMICAUCA, comenzamos a vincularnos como región agro minera por primera vez, con el acompañamiento de procesos hermanos como ASAMISSUR y AFASBA.

Desde la asociación se empezaron a trabajar los contenidos sociales de las J.A.C y en el 2010 participó en el primer evento del Congreso de los Pueblos y el Coordinador Nacional Agrario, teniendo en cuenta que en el 2009 también participó en la minga indígena del Cauca.

Asociación e Integración Agrominera del Nordeste Antioqueño

La Asociación e Integración Agrominera del Nordeste Antioqueño fue fundada por barequeros y mineros de auto subsistencia en la Vereda Tamar de Segovia el 10 de febrero del 2021. En ese entonces no se contaba con una corporación o una asociación que les ayudara a organizar el tema de la tierra a los campesinos de esa localidad, ni tampoco en organizar un proyecto socio productivo; era necesario que se creara una asociación incluyente ya que existían otras asociaciones cerca, pero no tenían en cuenta al barequero de esa región del Nordeste Antioqueño, y que asumieran compromisos de organizar ejes de trabajo como el de los Territorios Campesinos Agroalimentarios TECAM, y organizaciones de mujeres y de mineros artesanales y ancestrales.

Se recibió la asesoría de la organización Agrominera del sur, sur de Bolívar ASAMISSUR creando un comité que se llamó Comité de Integración Agrominero Del Nordeste Antioqueño. Y hoy como asociación sigue sosteniendo las mismas cinco letras CIANA con que se registró ante la cámara de comercio del magdalena medio.